Por encontrarse a merced de los vientos que soplan del noreste durante una gran parte del año, Pachuca, capital del Estado de Hidalgo, ostenta el sobrenombre de “la Bella Airosa”. La ciudad forma parte de uno de los centros mineros más importantes de México y aunque la actividad productiva ha disminuido en las últimas décadas, cualquier mención de la ciudad está estrechamente relacionada con la minería. Sus angostas calles empinadas y su entorno árido, pero no por ello poco atractivos, nos remiten a los antiguos asentamientos mineros del México colonial, como Guanajuato, Zacatecas o Taxco.