Con millones de jóvenes en pobreza no podemos construir una visión de futuro, dice Rosario Robles Berlanga.
En México hay 36.5 millones de jóvenes capaces de impulsar el desarrollo del país si cuentan con las herramientas adecuadas.
La secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, afirmó que es necesario abrir opciones para que los jóvenes puedan ser incluidos e incorporados al desarrollo del país, con lo cual México ganará en cohesión, seguridad, movilidad social y sentido de pertenencia.
La titular de la Sedesol mencionó que con 9.4 millones de mexicanos de entre 15 y 24 años de edad en situación de pobreza y 1.8 millones en pobreza extrema, “no podemos enfrentar los desafíos que nos planteamos ni construir una visión de futuro”.
En 2010, las personas de entre 12 y 29 años de edad sumaban el 32 por ciento de la población total, es decir, 36.5 millones de hombres y mujeres con toda la capacidad para impulsar el desarrollo nacional, siempre y cuando tengan las oportunidades de formarse adecuadamente; las herramientas para ser personas productivas y las condiciones para acceder a trabajos bien remunerados.
Robles Berlanga destacó que los jóvenes mexicanos enfrentan condiciones adversas y limitantes de su desarrollo, originadas en la pobreza, la marginación, las desigualdades, la violencia, la falta de oportunidades y de acceso a la salud y la educación, entre otros factores, que desde el gobierno de la República, conjuntamente con los gobiernos estatales y municipales, atendemos de manera coordinada las diferentes dependencias federales.
Estudios de organizaciones de la sociedad civil (OSC) señalan que la tasa anual de deserción en educación media superior es de 15 por ciento y que el 33 por ciento de los jóvenes de 15 a 19 años no asisten a la escuela por falta de recursos.
En cuanto a salud, 30 por ciento de los jóvenes carece de seguridad social y los problemas más graves que enfrentan son el sobrepeso y la salud reproductiva. Al respecto, se menciona que la principal causa de muerte materna juvenil son las afecciones originadas en periodo perinatal; 42 por ciento de las jóvenes menores de 18 años ha tenido algún embarazo, y los casos de SIDA en la población de entre 10 a 29 años de edad representan 52 por ciento del total.
En lo referente al empleo, se menciona que más de la cuarta parte de la población ocupada de 14 a 29 años de edad gana entre uno y dos salarios mínimos; 28 por ciento no recibe cantidad alguna por su trabajo y sólo 5 por ciento recibe más de cinco salarios mínimos; adicionalmente, más de la mitad no tiene contrato laboral y 47 por ciento carece de prestaciones.
La pobreza en que vive la mitad de la población afecta de manera especial a niños, niñas, adolescentes y jóvenes; del total de niños, niñas y adolescentes, 12 por ciento vive en pobreza extrema y la mayoría es indígena. Además, 28 por ciento de los menores de 18 años no tiene acceso a alimentos, mientras 3.3 millones de jóvenes tienen rezago educativo; 7.8 millones carecen de servicio de salud; 25 millones no cuentan con seguridad social; 7.3 millones no tienen acceso a la vivienda, y 9.8 millones viven sin servicios urbanos básicos.
Ante este panorama, la secretaria Robles Berlanga afirmó que los jóvenes tienen que estar presentes con su visión transversal en la Cruzada Nacional Contra el Hambre, que busca combatir el rezago educativo y la deserción escolar; de vivienda, calidad y servicios en la vivienda, y del ejercicio del derecho a la alimentación.
Asimismo, destacó los cambios en el diseño del Programa de Desarrollo Humano Oportunidades, que buscará vincular a los jóvenes becarios de educación media superior con los programas productivos y de ingreso de las diferentes dependencias federales, además de que serán población prioritaria para las becas de educación superior.