La leche llega a las familias que realmente lo necesitan en comunidades rurales y urbanas, afirma la titular de la Sedesol.
Encabezó la Primera Reunión Nacional de Gerentes de Liconsa, realizada en el puerto de Acapulco.
Como empresa social del Estado, Liconsa garantiza una mejor alimentación y nutrición de los mexicanos en pobreza extrema y carencia alimentaria, principalmente de menores de edad, mujeres y adultos mayores que hoy reciben estos apoyos en el marco de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, afirmó la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga.
Al encabezar la Primera Reunión Nacional de Gerentes de Liconsa, que se realiza en este puerto, la titular de la Sedesol sostuvo que con las modificaciones a las reglas de operación de la empresa paraestatal hoy llega a las comunidades y familias que realmente lo necesitan, ya sea en la mixteca de Oaxaca, en la sierra de Puebla o en la selva de Chiapas, con el propósito de hacer efectivo el derecho de todos los mexicanos a la alimentación.
“Era inconcebible que en el Pedregal de San Ángel, una de las zonas de más alto ingreso en la Ciudad de México, hubiera una lechería Liconsa; por eso hicimos las modificaciones necesarias y la reorientación de este programa para dar a la empresa un carácter verdaderamente social”, indicó.
Acompañada por el secretario de Gobierno, Jesús Martínez Garnelo, y el director general de Liconsa, Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, la secretaria Robles Berlanga dijo que en la política social de nueva generación del presidente Enrique Peña Nieto, el papel de la paraestatal es muy importante, porque incide directamente en los objetivos de la Cruzada, relacionados a una mejor alimentación y nutrición para niñas y niños.
“Hemos estado en municipios muy pobres a donde por primera vez llega Liconsa. Esto ya es un giro y habla de compromiso social, de una visión a favor de quienes menos tienen, de hombres y mujeres que carecen de lo más elemental y no pueden ejercer su derecho a la alimentación”, afirmó la funcionaria federal.
Destacó el papel de Liconsa, como empresa social y del Estado, en el abasto a los comedores comunitarios que se instalan por todo el país, y que en Guerrero suman ya 338 de los 500 que se instalarán en la costa chica y en la región de la montaña.
“Nuestra prioridad con Liconsa es llegar a las comunidades indígenas para cambiar los hábitos de alimentación de estas familias, a las que hay que enseñar que la leche es muy importante en su dieta”, dijo.
La titular de la Sedesol enfatizó que “desde la Cruzada Nacional Contra el Hambre, desde Liconsa y el resto de los programas sociales, se seguirá trabajando para hacer efectivo el derecho a la alimentación, pero también para avanzar en el crecimiento económico y en el desarrollo social incluyente del país”.
En este propósito, mencionó que los ciudadanos son agentes de transformación, la fuerza social imprescindible para superar la pobreza y acabar con el hambre, así como para avanzar en el proceso de reconstrucción del estado de Guerrero.
En la Reunión Nacional de Gerentes de Liconsa estuvieron el presidente de la Comisión de Desarrollo Social de la Cámara de Diputados, José Alejandro Montano Guzmán; el delegado de la Sedesol en Guerrero, José Armenta Tello; el presidente municipal de Acapulco, Luis Walton Aburto; la secretaria estatal de Desarrollo Social, Beatriz Mojica Morga, así como el presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles, Javier Zaldívar Rodríguez, entre otros.